colaboración de Reilly *
Hoy os presentamos una traducción de un artículo acerca de la rentabilidad de aislarse con los peces de la mesa, cuando juegan loose pasivo, muy bien explicado con una mano ejemplar.
Hoy os presentamos una traducción de un artículo acerca de la rentabilidad de aislarse con los peces de la mesa, cuando juegan loose pasivo, muy bien explicado con una mano ejemplar.
En la sala de poker de mi casino local hay un chico simpático que tiene una novia muy maja y guapa que juega muy mal. En una reciente partida de shorthanded 20$/40$ ella estaba haciendo limp (NT: igualando la ciega) alrededor del 75% de las veces, con maravillas como 42s, K6o, etc. Su juego post-flop no era mucho mejor. Supongo que porque ella estaba jugando un rango con tanta basura antes del flop se sentía obligada a ver cuatro o cinco cartas para tratar de ligar algo, llevando más allá la actitud de “ligar en el flop o fold” de muchos peces, hasta el turn y el river. Éramos cinco en la mano cuando ocurrió la siguiente mano.
Ella hizo limp en UTG y yo subí con Kc5c en el botón. Las ciegas era afortunadamente dos jugadores bastante tight y sólidos, y aunque el ciego pequeño en particular estaba probablemente al corriente de que probablemente aquí estuviera haciendo un raise light (NT: una subida con cartas más débiles de lo normal en nuestro rango de subida) era improbable que se involucrara con algo que no fuera particularmente decente. Antes del flop percibí que si subía la probabilidad de que el bote se jugara heads-up (NT: con sólo dos jugadores) contra la chica era alta y que mi mano tenía un valor decente si las ciegas decidían pagarme. En este caso, ambos se retiraron.